Lo de la Lola. Con cuatro eles. Así. Tal como suena. El único. No hay posibilidad de equivocarse. Lo de la lola se dice rápido y se abandona lento. Se entra con el saludo de las camareras, siempre amables, atentas y cercanas y se sale con la media sonrisa y los coloretes que pintan los tragos de ron en la cara. Es un bar en el que gusta estar, y se está como si nada. Como si tal cosa. Pues eso es lo que hemos reflejado en el logotipo. Como si nada, simplemente con la presencia de las “eles” de Lola, quien dirige este bar de copas, cervezas y vinos le es suficiente para ser distinto al resto. No necesita de una ornamentación excesiva. Solo de la finura, el estilo y la simpleza de las “eles” que representan la forma de ser de la jefa de este bar y que es, en definitiva el alma del bar mismo. Así es y así es su imagen corporativa. El juego con los tonos amarillos y lima así como los recursos, también aplicados en la decoración interior, son un guiño a los aderezos del gin tonic que con tanto esmero sirven Paloma, Lola y el resto de su equipo.